El día de hoy vamos a platicar de las pocas buenas noticias que se dan a conocer a la luz pública. En efecto, por un momento vamos a olvidar que Guatemala junto a Honduras, ocupan los primeros lugares en la cantidad de homicidios cometidos por arma de fuego. O que, Honduras y Guatemala, se ciñen los “honores” en la aplicación de “la justicia por mano propia”. Tampoco quisiéramos mencionar que Guatemala forma parte del grupo de los cuatro países con más agresiones sexuales, abajo por escaso margen de Bolivia, República Dominicana y Brasil. Sin pecar de ser indiferentes, por un momento, nos vamos a olvidar que nuestro país tiene un tercer lugar en la cantidad de robos con uso de violencia junto a Honduras y Venezuela. Todas esas escalofriantes estadísticas que fueron publicadas en el Informe Regional de Desarrollo Humano 2013-2014 y difundidas en Prensa Libre el día lunes 18 de Noviembre del año en curso, podrían ser tratadas y comentadas en una próxima entrada a este blog. El día de hoy vamos al encuentro de las buenas noticias. Esas crónicas que nos llevan a la composición de exaltaciones y elogios dedicados a quienes son realmente merecedores de esos honores.
Y decimos los que verdaderamente son merecedores, porque sabemos que en medio de tanta maldad estamos plagados de personajes oscuros, especialistas en la estafa, quienes se presentan como lobos con piel de oveja haciendo uso de artimañas y engaños para convencer de sus “habilidades” a todo un pueblo formado por gente humilde, desconocedora de los fundamentos teóricos y, en proporciones generales de escasa preparación, que paga por espectáculos de calidad ridícula, constituyendo una inducción negativa en la formación de las nuevas generaciones.
Hoy vamos a hablar de la princesa de la gimnasia nacional. De esa niña que a base de sacrificio y disciplina se convirtió en plus-medallista en los Juegos Bolivarianos 2013. Sin dejar de mencionar al hijo de Kukulkán: el gran Erick Barrondo, merecedor de la alta investidura con la cual se le ha distinguido. Pero, no basta con decir que lo que han hecho también es fruto de un espíritu indómito que les dio la convicción para desarrollar a base de práctica, sacrificio, obediencia y disciplina los logros alcanzados, si no que, en almas de esta naturaleza la motivación elemental brota del profundo deseo de ser orientadores legítimos de las multitudes.
No es por dinero, es por la gloria de convertirse en lo que siempre se quiso ser. Lo demás llega por añadidura.
Como corolario de de estas cartas de presentación, queremos mencionar la carta triple: recientemente, surgió cual Ave Fénix la figura de Gaby Moreno, primer GRAMMY Latino para Guatemala. Si usted quiere en otro ámbito,
la estética, que viene a ser el complemento de las artes espartanas. Y, volvemos a trillar la incansable trilla: estos méritos, estos honores, solo pueden ser alcanzados por espíritus que no se rinden ante el desafío que implica el esfuerzo de toda una vida dedicada al estudio constante, tampoco se rinden ante la envidia y/o el pesimismo, o una situación económica adversa:
la práctica que deriva en praxis solo puede alcanzar la perfección cuando se va más allá de lo que establece el compromiso. No hay lugar para hacer comparaciones entre ellos,
porque el género al que ellos pertenecen es otro género del todo diferente al común de los mortales. Estamos hablando de almas dotadas de una intuición supra-natural, incansables en el desarrollo del conocimiento, voluntariosos en la inducción práctica, dotados de una genialidad que sobrepasa cualquier medida a la que se pudiera someter las capacidades intelectivas, originales y super-creativos. Seres que, como se dice popularmente viven en otra dimensión,
cuyo objetivo consiste en alcanzar la perfección, sin trucos, sin engaño, sin falacias, con la humildad bien puesta en la reflexión, aceptando de sus maestros la crítica y la corrección que les permita alcanzar el ideal, hasta constituir un nuevo arqué: el ejemplo digno de ser imitado, la marca indeleble que despierta la admiración en la consciencia colectiva para ofrendarles el soporte que puede elevarlos a la categoría de entidades propias del Olimpo.
Ellos son los verdaderos constructores de la paz. Los que se ganan el favor del pueblo a base de ejemplos. Ellos son los que merecen el tributo de todos los que han adquirido la capacidad de vislumbrar un horizonte libre del trinquete y de la ignorancia.
Ellos son los que se prodigan con honestidad sin pedir nada a cambio.
Salud Gaby Moreno. Salud Sofía Gómez, Salud Erick Barrondo. En nombre de la gente buena de Guatemala Dios los bendiga. El Autor.
Nota de Gala: Hoy miércoles 27 de Noviembre 2013: Erick Barrondo ganó la medalla de Oro en los Juegos Bolivarianos. Vale.
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